Mojado de cama

Mejor conocido como enuresis, se refiere a la pérdida involuntaria de orina que es un niño de cuatro a cinco años (que es el control de la vejiga) mientras duerme y que coloquialmente llamado "mojado la cama". Es importante no a confundirla con la incontinencia urinaria, que es una situación completamente diferente, en el que no existe ningún control sobre la micción sin importar la hora del día, y su principal característica es la presencia de ligeras gotas de orina que manchan o dejar ropa interior húmeda.

¿Cuáles son las luces rojas?

Hojas automáticos de micción y inesperadasLas y pijama para niños amanecer mojado o húmedasEn que algunos casos, los episodios enuréticos ocurren una o dos veces al mes, mientras que en otros, dos o tres veces por semana durante tres meses seguidos.

Clasificación

1. Primera categoría

Primaria: Cuando el niño aún no ha adquirido control de esfínteres. Es que la más común se produce en el 80% de los casos

Secundaria: se produce en los niños de entre cinco y seis años, que a pesar de tener el control de la micción durante al menos seis meses, presentó nuevamente pérdida involuntaria de la orina, generalmente después de algún evento traumático

2. Como se acompaña de otros síntomas

Mono-sintomática: Hay ausencia de signos o síntomas que

No mono-sintomática: presenta otras alteraciones como la sensación incontrolable de la micción, micción frecuente, incontinencia urinaria, etc.

Frecuencia 3

Continua: todos los días

Discontinuo: Episodios enuréticos son irregulares

Causas

Aunque hay una gran variedad, las dos primeras son las más frecuentes:

• Factor hormonal: falta o disminución de los niveles de ADH, que es la hormona antidiurética inadecuada o también llamada vasopresina, que tiene la función de reducir la producción de orina por la noche para que no se sobrecarga la vejiga

• Estrés o tensión emocional: reacciones que pueden surgir de situaciones como el cambio de casa, escuela o año escolar, la llegada de un hermano, la pérdida de un ser querido o una mascota, un entorno familiar conflictivo, etc.

• Desarrollo lento del sistema nervioso central: que reducía el control de la vejiga del niño

• Las enfermedades físicas: hay una amplia gama de dolencias, de las lesiones de la columna inferior, malformaciones congénitas del tracto genitourinario, infecciones del tracto urinario a la diabetes. Sin embargo, es poco probable que alguno de ellos es el desencadenador.

¿Qué puede hacer?

Lo primero es evitar el ridículo, castigo y regañando, así como comparaciones con famliares, amigos, etc. y que en vez de solucioanr el problema provocaás a intensificar. Ahora, si se sospecha de una posible alteración física, mejor es consultar con un urólogo pediátrico para analizar en detalle el caso de su hijo y que estudios y pruebas apropiadas. Pero si crees que es un problema mental, intenta hablar a él para descubrir lo que se trate o afligidos. Si no se obtiene, y el problema persiste, será mejor ir con un psicólogo infantil.

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Fuente: blogmoda.com